Mensaje a las familias con motivo del Sínodo de Don Francisco Cerro, obispo de Coria-Cáceres
Como tantas veces he repetido sin
la familia tendríamos escasas posibilidades de una evangelización que abarque a
todos, hombres, mujeres, niños, adolescentes, jóvenes. Quiero agradecer a todas
las familias cristianas su vida, su testimonio, su fecundidad y sobre todo por
invitar y acoger a Jesús a compartir su vida.
¿Os cuento el Sínodo?
Cuando convoqué el Sínodo
Diocesano tenía y tengo claro que todas mis fuerzas quería dedicarlas a cuidar,
potenciar, formar y ayudar a las familias.
Primero. Quiero agradecer y
animaros a seguir siendo lo que sois, como iglesia doméstica, un lugar, un
espacio de comunión, de gozo compartido, de experimentaros amados, no por lo
que tenemos sino por lo que somos.
Segundo. Quiero lanzaros a que
viváis vuestra dimensión misionera y profética. Las familias cristianas sois
esperanza para una sociedad y un mundo en el que curiosamente sigue siendo lo
más valorado y que in embargo a la vez la torpedea. Son muchas las familias que
no ayudan a crecer en la profunda identidad de la familia cristiana. Os animo a
ser portadores y sembradores de vida.
Tercero. Seguid participando en
el Sínodo a través de las parroquias, movimientos, comunidades, asociaciones
familiaristas. Vuestra presencia abierta nos anima a todos a seguir haciendo d
ela diócesis y de las parroquias, la familia del pueblo de Dios que camina junto
con Cristo para renovar y fortalecer la fe.
Quiero haceros llegar el apoyo de
vuestros pastores que os queremos de verdad y os necesitamos para ser en el
mundo, en la sociedad un lugar, un baluarte
de vida y esperanza. Las familias tenéis en nuestra Diócesis medios para
ser cuidadas de corazón: la parroquia y también la Delegación de pastoral
familiar y el Centro de orientación familiar (COF), el Centro de escucha “San
Camilo” y los movimientos familiaristas como el Movimiento Familiar cristiano,
y todas las comunidades donde toda la familia celebra la fe.
Agradezco a todas las familias
cristianas su entrega. Rezo por las que están pasando momentos difíciles.
Comprendo y lucho por los que están en paro, por los que pasan por la
enfermedad, la muerte de un ser querido. Todas vuestras dificultades y
sufrimientos las hago mías y rezo por vosotros.
Francisco Cerro Chaves. Obispo de Coria-Cáceres