EL SÍNODO Y LAS HERRAMIENTAS DEL LAICADO CRISTIANO (1)

Estamos ya en el cuaderno número tres del Sínodo que nos plantea descubrir el papel o la función principal de los laicos cristianos en la sociedad actual para aportar nuestro pensamiento sobre el sentido de la vida, la dignidad humana, los valores éticos y morales, los modos de participar en democracia...

Claro que lo esencial de la fe cristiana no cambia nunca pero se tiene que encarnar en las peculiaridades de cada momento social e histórico de nuestra diócesis de Coria-Cáceres en nuestros pueblos, en sus carencias, en el futuro de los jóvenes, en las decisiones políticas que van a configurar un futuro inamovible o un futuro emprendedor.

A nosotros también, como laicos cristianos, nos toca descubrirlo, promoverlo y vivirlo en nuestro territorio del “aquí y del ahora” estando abiertos siempre al horizonte del mundo y de iglesia universal pero, sin olvidar la realidad donde debemos sembrar el grano de trigo e introducir la levadura que transforma y hace crecer a la masa.

En esta serie de artículos se resaltarán esos aspectos como partes de un todo que comprende los contenidos de la fe, su transmisión y celebración del culto (cuaderno 1); desde las claves del compromiso social y caritativo de la Iglesia (cuaderno 2); pero todo eso no brotará si no se dispone de un gran número de laicos cristianos, hombres y mujeres responsables y maduros, capaces de ser semilla y levadura en los lugares de la sociedad y de la iglesia donde se toman las grandes decisiones vitales. 

Me voy a servir de la caja de herramientas porque puede ser un recurso divulgativo que nos valga de aliento para adentrarnos con ánimo en este apasionante reto.
La caja de herramientas, que llevamos en el coche o que tenemos en casa, contiene mucha cacharrería y todas son útiles y cada una tiene su función. Todas sirven para arreglar averías, o para prevenirlas y en el caso de los albañiles para construirlas. Algo parecido deberá ser la vida del laico cristiano en el mundo.
 Cada semana se presentará una herramienta y nos plantearemos qué vamos a hacer con ella para mejorar lo que tenemos y para construir lo que necesitamos en la tierra donde viven los hombres y mujeres, creyentes o no,  de  nuestra diócesis.

 Espero que cada semana aportéis vuestras reflexiones y sugerencias y se lo contéis a mucha gente.

Envía tus aportaciones a florentinoescribano@yahoo.es

Hasta la próxima semana.


Tino Escribano Ruiz