El Sínodo y las señales para la organización pastoral: Área de servicios (7)
-EDUCACIÓN VIAL. Esta señal indica
que hay una zona que ofrece servicios
parar repostar, descansar, comer, comprar regalos, disfrutar…
-MENSAJE POSITIVO. La carretera nos
mima y nos cuida. El interés por cuidar
materialmente a las personas es evidente. Somos una parte de los
privilegiados que en el viaje de la vida tenemos acceso a disfrutar de
abundantes los bienes.
-LA
SIRENA DE ALARMA
DIOCESANA. Pero no para todo es así. Entre nosotros existen personas pobres, indigentes, parados, sin
hogar, inmigrantes… que no tienen acceso a disfrutar de los servicios básicos para
vivir. Su voz no se oye. La encuesta del sínodo nos ha hecho ver que nos cuesta vivir la dimensión
social de la fe pues hay mucha reticencia a la hora de implicarnos en la
vida pública para promover la justicia social. En general nos conformamos
con hacer alguna campaña de beneficencia
en algún evento religioso tradicional con la mejor voluntad de sacar dinero
para ayudar a los pobres pero, en general no hay una voz que dé continuidad de
acción para denunciar las causas que
generan el problema e implicarnos socialmente en ello. Nos cuesta ir más
allá de la beneficencia. La alarma nos
despierta para impulsar otras formas organizativas más incisivas y más acordes con la promoción de las
personas.
-EDUCACIÓN SINODAL. Es como volver a la “autoescuela” para
actualizarnos en las nuevas señales. El cuaderno 2 del Sínodo nos planteó ya el
gran reto de crecer en la dimensión
social de la fe como iglesia solidaria con los pobres para que también
puedan “repostar” en las vías de descanso. Ahora con el tema 4 se nos invita a
organizarnos para “salir de la
propia comodidad y atrevernos a
llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio” (E.G.20)…
para el desarrollo integral de los más abandonados de la sociedad” (E.G.186). Aún estamos a tiempo.
-LA
GUÍA DEL PAPA: Nos dice:
“los pobres son los destinatarios privilegiados del Evangelio”, y la
evangelización dirigida gratuitamente a
ellos es signo del reino que Jesús
vino a traer. Hay que decir sin más vueltas que existe un vínculo inseparable
entre nuestra fe y los pobres E. G48). Cada cristiano y cada comunidad están
llamados a ser instrumentos de Dios para
la liberación y promoción de los pobres, de tal manera que puedan
integrarse plenamente en la sociedad; esto supone que seamos dóciles y atentos
para escuchar el clamor del pobre y
socorrerlo (E.G. 187).
-LA ACTITUD :
¡Sensibilidad social! para
escuchar el clamor de pueblos enteros, de los pueblos más pobres de la tierra
(E.G.190)… nos escandaliza saber que existe
alimento suficiente para todos y que el hambre se debe a la mala
distribución de los bienes (E.G.191). Cada persona es importante. Es urgente relacionar nuestras
organizaciones de culto con la dimensión social de la fe.
¿Qué renovación organizativa habría que hacer
urgentemente en tu parroquia, asociación.., para que los espacios benéficos se transformen
en “áreas de servicios” más acordes
con lo que dice el papa en la Evangelii Gaudium?
Envía
tus aportaciones a florentinoescribano@yahoo.es
Hasta la próxima semana.
Tino Escribano Ruiz